lunes, 10 de marzo de 2008

Ética en el uso de los recursos tecnológicos en línea.



Por Arturo Elías Ramírez.

Introducción

El reto de la educación a distancia en instituciones educativas de nivel superior debe ser el mismo que el reto de la educación presencial, a mi parecer: incrementar el nivel de calidad de la formación universitaria que se esta ofreciendo a los alumnos. En donde los profesores estructuran y facilitan la experiencia de aprendizaje, pero comparten el proceso con los estudiantes mediante una guía en el aprendizaje individual, llevando una planeación de actividades colectivas que lo refuercen, identificando los recursos tradicionales o innovadores que apoyen el aprendizaje, de manera que empleando la información que los alumnos han adquirido individualmente lo puedan explayar en sesiones multidireccionales con sus compañeros para robustecer la formación de estos nuevos conocimientos en cada alumno. Siempre teniendo muy presente que se busca enseñar valores por encima del contenido mismo de la materia, que representen para el alumno experiencias estéticas que se deriven de la misma praxis educativa.

Es claro entonces que aún en ambientes de educación a distancia el rol del profesor sigue siendo fundamental para un buen proceso de aprendizaje.

Necesidades de las instituciones

Antes de cualquier disertación acerca del desempeño de los profesores es necesario recordar que la educación se debe ver como un derecho universal de los seres humanos según Wiley (2006) citado por Caswell (2008):

“Creemos que todos los seres humanos están dotados con una capacidad de aprender, mejorar y progresar. La oportunidad educativa es el mecanismo por el cual se realizan estas capacidades. Por lo tanto, el acceso libre y abierto a una oportunidad educativa es un derecho humano.”

Entonces aunque aún contrario a lo que actualmente se puede implementar en la mayoría de las instituciones educativas, es indudable que el uso de las TIC’s han ocasionado un renacimiento del concepto de educación a distancia y en teoría la capacidad de poder llegar a un mayor número de personas. Pero es en este panorama donde realmente entra la disyuntiva de las instituciones educativas en cuanto a la reparación con la que cuentan en lo referente a recursos tecnológicos, educativos y humanos para poder afrontar un esquema educativo de este orden, siendo evidente que requieren de un fortalecimiento total en infraestructura para lograr un buen desempeño.

Aquí presentó una reflexión de lo que implica un profesorado preparado para lograr una praxis educativa a partir de una buena práctica docente.

Primeramente es necesario que las instituciones educativas se preocupen por la formación de sus profesores de tal forma que puedan responder a las nuevas necesidades de la praxis educativa, para ello busca definir un modelo pedagógico que incorpore TIC's, modificando el enfoque conductista tradicional, mediante una alfabetización tecnológica del docente con un enfoque pedagógico y emergente, de tal forma que se puedan redefinir los requerimientos y rasgos del perfil de los docentes debido a que las condiciones y la contextualización han cambiado y ahora se hace hincapié, según lo menciona Calzadilla (s.f) en:

• un interés de la sociedad centrado en la actuación docente
• una reorientación de la acción pedagógica hacia el desarrollo de las destrezas del pensamiento, el trabajo cooperativo y la interdisciplinariedad
• una mayor paridad y compartición de los alumnos y los profesores en el proceso de aprendizaje
• la necesidad de formación de profesores que les permita adecuarse a los cambios tradicionales en los ambientes de aprendizajes.

Es muy importante sin embargo que no toda la responsabilidad recaiga en las instituciones para estar preparadas, sino que también existe una gran corresponsabilidad por parte de los profesores en estar capacitados y afrontar lo más éticamente posible una educación que responda a las necesidades de globalización de las sociedades de la información, pero luchando siempre por mantener una identidad local.

Desempeño docente en la práctica educativa

Partiendo de la premisa de que tanto las instituciones educativas como sus profesores han adquirido conciencia de los compromisos y retos que involucran un desempeño ético en el proceso educativo y de que todos los seres humanos como entes sociales que somos estamos sujetos a valores sociales que los rigen y que influyen en las relaciones entre profesores y estudiantes se pueden lograr las siguientes reflexiones acerca de una práctica educativa docente desde un punto de vista ético.

Es muy claro que la labor “técnica” de un profesor es preparar a los alumnos en los temas de la disciplina que imparte, sin embargo una praxis educativa va a orientar a la práctica docente a que los conocimientos tradicionales se puedan contextualizar en situaciones reales y actuales para poder crear experiencias significativas que permitan al alumno adecuar los conocimientos a su vida de tal manera que le permitan desenvolverse como un ser humano moral en su entorno social. Lo anterior se logra mediante la guía y experiencia del profesor de tal forma que se motiva al estudiante a partir de su propia iniciativa a lograr romper con esquemas preestablecidos que le permitan ampliar sus expectativas y capacidades, presentándose con ello un sentido ético, político y estético en la práctica docente.

Conclusiones

El profesor como parte fundamental en los procesos educativos tiene la responsabilidad
moral de lograr que los alumnos (que son la parte central de dichos procesos) adquieran sus propios valores que les permitan afrontar la vida, más allá de los conocimientos inherentes a la materia que imparte, es decir lograr crear individuos reflexivos, críticos e independientes que sean capaces de provocar su crecimiento individual pero también mejoras en su entorno social a partir de la oportunidad educativa a la que se sometieron. Es por ello que el profesor debe estar éticamente comprometido mediante el uso creativo de todos los recursos didácticos y tecnológicos que tenga a su alcance, teniendo en cuenta la transversalidad de la ética y mediante una buena práctica docente a logra una praxis educativa que eduque a los alumnos para la vida.

Bibliografía

Calzadilla M. E., “De una educación a distancia a una educación sin distancias: ventajas y desventajas de la introducción de las tecnologías de información al contexto del IMPM”, http://bine.org.mx/padi/file.php/4/ponencias/adis/edicadisindis.html

Caswell T., Henson S., Jensen M., Wiley D., “ Open Educational Resources: Enabling universal education”, The International Review of Research in Open and Distance Learning, Vol 9, No 1 (2008), ISSN: 1492-3831